La llama se caracteriza por presentar un patrón de coloración variable, ya que puede ser de café a negro, o a blanco y generalmente presentan unas manchas irregulares de tonos más oscuros. El pelaje es largo, denso y fino, pero en la cabeza, cuello y patas es más corto. La longitud total varía de 1.2 a 2.25 m., mientras la de la cola varía de 15 a 25 cm. el peso varia de 48 a 140 Kg.
La llama es una especie que ha sido domesticada. Sin embargo sus hábitos son muy semejantes a los del guanaco. Vive en grupos formados por un macho dominante, varias hembras y las crías. Los machos jóvenes o viejos que no han formado su harén, viven en grupos de solteros, cuando los machos compiten por las hembras emiten un grito muy agudo. En caso de sentirse amenazadas, escupen una masa de material semidigerida. Aparentemente, es el primer animal que se utilizó como bestia de carga 96 Kg. durante 26 Km, en terreno de montaña, a una altura de 5000 m. Su carne se utiliza como alimento, su cuero para la fabricación de calzado, de su grasa se hacen velas y sus excrementos llamados taquía sirven como combustible.